Will you marry me?

                                     

    Si nos remitimos a la Ley de las XII Tablas, en el Derecho Romano el término "manus" era el poder jurídico que el marido ejercía sobre su mujer.  El pater familias era la figura de quien ejercía autoridad sobre todos los alieni juris y esclavos sometidos a él: sus hijos y descendientes, su mujer y las personas sujetas a su tutela o in mancipium. Esa potestad otorgaba disposición económica, patrimonial y judicial sobre los bienes, ganancias y disposiciones de la mujer. Es decir, la mujer pasaba de ser propiedad de su padre a ser propiedad de su marido. 

    El objeto de esta institución, más social que jurídica,  era mantener la familia y la religión, así como las tradiciones (usos y costumbres), servir al Estado y mantener la paz. El matrimonio, una vez formalizado, debía mantener una convivencia durante un año ininterrumpido, previo consentimiento del padre o tutor de ella. A partir de este periodo de tiempo, el hombre adquiría total propiedad sobre la mujer. 

    El "uxor in manu" o "mater familiae" era el momento en el que la mujer salía de su familia civil y entraba en la de su marido, pasando a ser considerada como hija (sustituyendo así el rol de la hermana del esposo) respecto del suegro y del abuelo. El marido era el juez de su propia esposa, ello le otorgaba el poder de matarla si la sorprendía en adulterio, podía condenarla y castigarla si cometía algún acto o conducta deshonesta (beber vino, faltar a la fe conyugal, etc.). 

    Así, tuteladas, sometidas, controladas y esclavizadas vivían las mujeres hasta la época de Justiniano, donde se empezaron a constituir matrimonios libres con consentimiento de ambos cónyuges y con libertad de disposición de los bienes cada uno. También se introdujo la bigamia o el divorcio.

    Curiosa también era la institución de "la covada". Consistía en que, tras al parto, la mujer parturienta volvía a sus labores domésticas o del campo, mientras que el marido se metía en la cama simulando los dolores del parto y recibiendo cuidados y atenciones. Se ha estudiado en culturas íberas (maragatos y mallorquines), en pueblos o tribus del Caribe, malayos o cántabros y en zonas de Burgos. Se conoce que era una forma de reconocimiento de la paternidad con respecto a los hijos.

    En la evolución del matrimonio dentro del derecho de familia en numerosas sociedades, se ha mantenido el nombre como sus orígenes. ¿Y por qué el casamiento se llama matrimonio? Porque se entendía que la mujer era quien llevaba la carga doméstica, desde el embarazo, el parto y lactancia entre otros cuidados...por lo que se adoptó el término matrimonio, y no patrimonio.

    En España, en 1932 gracias al jurista Fernando de los Ríos, se legisló la Ley del Divorcio, para la disolución de matrimonios por causa diferente a la muerte de uno o ambos cónyuges. En 1981 se aprobó la Ley 30/1981 que modificaba el Código Civil en relación a la separación, el divorcio y la nulidad matrimonial. En 2005 se aprueba el matrimonio igualitario, que permitía igualdad en derechos a contrayentes independientemente de su orientación sexual, así como la agilidad procesal al reducirse a 3 meses el divorcio sin tener que pasar por la separación previa.

    Hace unos meses me vengo preguntando sobre las tradiciones y costumbres que permanecen muy arraigadas en nuestra sociedad. Con el paso del tiempo, continuamos utilizando simbolismos como las arras en matrimonios católicos (el marido provee a la mujer económicamente, le da sustento y la mantiene) o la llamada "pedida" del novio al solicitarle permiso al padre de la novia para contraer matrimonio. Tanto por la libertad de las mujeres como en aras de garantizar la conciliación, debemos plantearnos qué aspectos fallan en cuanto a querer contraer matrimonio libre 2 personas y qué conductas podemos mejorar para ganar en conciliación familiar. 

    En primer lugar, si dos personas deciden casarse no entiendo ciertos comentarios heteros en los que deba haber un anillo de pedida del hombre hacia la mujer como símbolo o ritual previo. En el caso de matrimonios homosexuales, ¿se cuestiona quién de la pareja debe dar el primer paso?

    Por otro lado, cuando la boda se celebra la mujer debe llevar algo prestado, algo nuevo y algo azul. ¿Y el hombre? Algunas mujeres utilizaban la liga como complemento azul el día del matrimonio, así demostraban su virginidad y pureza ante los presentes. A veces el novio le quitaba la liga para dársela al próximo colega contrayente. Y a continuación, para rematar la faena, se hacía la tirada o entrega del ramo por parte de la novia a otra mujer como símbolo de compromiso futuro próximo.

    Simplemente viendo y escuchando la cantidad de tradiciones culturales que tenemos, vuelvo a mi habitación con sentimientos encontrados entre nostalgia por algunas féminas y alegría por pensar que las cosas van cambiando...